lunes, 4 de noviembre de 2013

¡Qué Bonito es el Campo!

Los animes de adolescentes en la encrucijada, con problemas para decidir el rumbo de su vida o con dificultades para socializar son más viejos que la pana. Los animes tipo "pez fuera del agua", también. Los hay prácticamente de todos los colores y sabores. No obstante, Silver Spoon se ha llevado de calle mi aprecio y mi simpatía por unir ambas temáticas con dos características que marcan la identidad de la serie: Está ambientada en una granja-escuela y el protagonista es de una ingenuidad y honradez emocional que lo hace entrañable.



El Dr. Snack ya nos habló de Gin no Saji o Silver Spoon brevemente en su especial Anime de Verano, así que no incidiré demasiado en el argumento. Adolescente que se siente demasiado presionado, especialmente por su padre, para rendir en los estudios, toca fondo y decide darse una segunda oportunidad en una granja-escuela, lejos de la familia y de su ambiente urbanita habitual. Y cada capítulo veremos cómo va a encajando en el mundo agrario, cómo socializa con sus amigos estudiantes y cómo descubre una alegría en el vivir que proviene sobre todo de lo que hace y no tanto de lo que sabe.

Silver Spoon no tiene ningún misterio. Es simple y llanamente una historia de autodescubrimiento, autoaceptación y crecimiento personal a través de las variopintas aventuras de un urbanita que no sabe nada del mundo rural en una escuela agraria. Pero está contada con un ritmo envidiable, con una gran capacidad para encajar historias autoconclusivas en cada capítulo dentro de un mosaico mayor en el conjunto de la serie y los personajes transpiran candidez y humanidad. El gancho inicial de la serie es que Yugo Hachiken, el prota, no sabe hacer la O con un canuto. Pero es el tipo de chaval que se esfuerza. Que aprende. Y que no tiene problema en reconocer sus miedos, sus dudas y su ignorancia. Lo acompañan toda una caterva de estudiantes de trasfondo rural que están estudiando para hacerse cargo de los negocios familiares. Todos ellos mucho más expertos en los caminos del agro (no, ese agro no, hablo del mundo agrícola). 

La serie es voluntariamente gráfica y al mismo tiempo paródica en la plasmación del inevitable sacrificio de los animales.

No es sencillo explicar por qué Silver Spoon se ve tan fácil y se disfruta con una sonrisa tan amplia.  Quizás es por su "blancura" narrativa. Es sencilla de seguir, se centra sobre todo en un único personaje y aunque uno pueda aprender algo con cada capítulo, el objetivo aquí es entretener y divertir. Divertir, sí. Porque está dotada de un descacharrante sentido del humor. Hacer humor de lo cotidiano es todo un arte y Silver Spoon logra poner a sus personajes en situaciones ridículas, pero no inverosímiles. El entusiasmo de Hachiken por casi todo lo que hace, sus reacciones over the top y sus preocupaciones aparentemente infantiles (¿Críar cerdos que luego vas a matar? ¡Pero eso es cruel!) son motivo de risa y burla de sus compañeros. Luego, poco a poco él va viendo las cosas más como sus compañeros y sus compañeros más como él, hasta alcanzar ese punto de enriquecimiento mutuo que solo surge cuando se exponen e intercambian ideas y sentimientos.

Tampoco podría ser un buen anime slice of life si no tuviera alguna clase de romance. Que son estudiantes adolescentes, al fin y al cabo. A Hachiken le llama la atención casi de inmediato la risueña Aki Mikage, aficionada a la hípica. Aunque en este caso, más que romance, sería mejor decir un "intento de pensamiento en iniciar un acercamiento mínimamente romántico". El pobre Hachiken está muy verde, y no solo en lo que al mundo agrícola se refiere.

Mikage es para Hachiken el lado amable de lo rural. Simpatía y buen corazón en un bonito envoltorio. Así cualquiera se piensa dejar la ciudad, no te digo.

Enfrentado a titánicas tareas casi imposibles como hacer desde cero una pizza, ordeñar una vaca, trocear y sacar las entrañas a un ciervo o conducir ganado, Hachiken y su panda de amigos con intereses diversos y caracteres variopintos (desde el deportista serio hasta el bromas total, pasando por el proyecto de veterinario al que le asusta la sangre) irán forjando su amistad y su visión del mundo. Con una narración sencilla y ninguna doblez argumental, la serie logra trasladar al espectador parte de las cuitas del protagonista, haciéndonos partícipes de las difíciles decisiones morales que normalmente damos por hechas pero que igualmente tomamos ya sea de modo activo o pasivo.

Hachiken, Maestro y Mago Pizzero, deja a todo el mundo extasiado con su última creación. Sí, claro, exagerar es obligatorio.

Indicaciones: Amantes del anime slice of life y tipo pez fuera del agua. Quienes quieran un anime sencillo pero con mucho corazón. Humor de lo cotidiano con el punto justo de parodia.

Contraindicaciones: Adrinalínicos. Fantasiosos. Gente de corcho.

Interacciones: Lo bueno de Silver Spoon es que marida bien con casi todo. Anime de colegio, check. Anime de vida cotidiana, check. Anime de estar fuera de tu elemento, check. Anime de comedia amable, check. Anime de autodescubrimiento, check.

Efectos Secundarios: Momentáneamente genera cierto aprecio por el mundo rural. Deja la impresión de ser un trabajo duro, pero también reconfortante. Aunque no olvida que a veces pasan desgracias inevitables.

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