Aunque no se trata de una demencial adaptación del videojuego Grand Theft Auto (todo llegará), San Andreas es una película con una premisa igual de manida y floja. The Rock desaprovecha su capacidad de caer simpático haciendo acción entretenida para y acaba en una película de desastres del montón. Con Paul Giamatti para hacer de experto en trasladar la magnitud de la catástrofe, a Dwayne Johnson y Carla Gugino les tocará sobrevivir a los destrozos causados por el bailoteo de la falla que da nombre a la película. Con la sagrada misión de ir de Los Ángeles a San Francisco a rescatar a su hija, interpretada por la espectacular Alexandra Daddario, el metraje parece sostenerse a base de drama facilón y efectos especiales bien gordos para ponérselo complicado a la pareja protagonista. Yo como que paso, pero a saber, igual para un domingo de resaca...
Los estrenos de la semana traen cosas variadas: para los fans de Neill Blomkamp (entre los que no me encuentro) hay Chappie y los de The Cage podremos asistir pasmados a esta monstruosidad. Aunque bueno, por elegir, yo apostaría por Paul Thomas Anderson y su Puro Vicio.